Hay palabras que no usamos mucho, pero que acabamos teniendo que usar alguna vez, o que al menos acabamos oyendo en la tele, en la calle o en el súper. Es el caso de férula, que aunque tiene otros significados, se usa principalmente para referirse a estructuras de fijación que se colocan en el cuerpo para tratar fracturas u otros problemas. Las hay de muchos materiales y de formas muy diferentes.
Pues bien, eso es una férula y siempre lo será. *Cérula es la palabra inexistente que usamos por error.
Y ya que estamos, podemos alertar sobre otra palabra que también sufre ese cambio de -f por -c. En realidad, dos palabras: pifia y pifiar. Una pifia es ‘un error, descuido o metedura de pata’, y pifiar, su verbo, es ‘la acción de meter la pata, de fallar o equivocarse’, aunque tiene también otras importantes acepciones. Ambas palabras se escriben con -f, aunque resulta frecuente encontrárselas mal escritas: *picia y *piciar.
En resumen, que la pifiaremos bien pifiada si escribimos *cérula. Será una pifia en toda regla.